Ingredientes:

  • 170 g Quinoa – sin cocinar
  • 240 ml Agua – a temperatura ambiente
    Sabores opcionales
  • ½ cucharadita de Sal
  • ¼ cucharadita de Ajo en polvo

 

Instrucciones:

  1. Remoja la quinoa en un recipiente durante al menos 3 horas para eliminar su sabor amargo y ablandar el grano, lo que facilitará su mezcla.
  2. Coloca la quinoa cruda en un colador y enjuágala con agua fría para eliminar cualquier suciedad o impureza.
  3. Escurre la quinoa y colócala en el recipiente de la batidora de alta velocidad junto con los ingredientes restantes: agua y cualquier saborizante que desees, como sal y ajo en polvo.
  4. Cierra la tapa del recipiente de la batidora y bate a alta velocidad durante aproximadamente 1 minuto o hasta que la masa esté suave. La masa no debe ser muy espesa, debe tener una consistencia líquida similar a la de la masa para crepes. Es posible que debas detener la batidora, raspar los lados y repetir el proceso. La masa debe quedar suave, sin trozos ni quinoa visible.
  5. Transfiere la masa a un bol y déjala reposar durante 10 minutos para que espese. Mientras tanto, prepara la sartén.
    Calienta una sartén a fuego medio y rocía aceite de oliva o ghee por toda la sartén. Debes usar un poco de aceite en la sartén, de lo contrario, la masa se pegará y se romperá.
  6. Vierte 1/4 de taza de masa en el centro de la sartén y, utilizando el dorso de una cuchara (o el dorso de la taza de medir), realiza movimientos circulares para extender suavemente la masa desde el centro hacia afuera hasta formar un crepe 12 cm de diámetro.
  7. Cocina durante 2 minutos por un lado, luego dale la vuelta con una espátula y cocina por el otro lado. Coloca los crepes cocidos en un plato o una rejilla mientras cocinas el resto de la masa. Asegúrate de volver a aceitar la sartén entre cada crepe.
  8. Deja que los crepes se enfríen sobre una rejilla. No apiles los crepes calientes sin colocar papel de horno entre ellas, ya que se pegarán. Tienden a pegarse menos cuando están fríos.
  9. Para el desayuno, sirve con tahini, mantequilla, algo de proteina como pavo o trozos de pollo.

 

Almacenamiento:

Guárdalas en el refrigerador en un recipiente sellado durante hasta 3 días, asegurándote de que las tortillas de quinoa no se toquen ni se superpongan, ya que podrían pegarse. Re-calienta en una sartén.

Congélalas envueltas individualmente y descongélalas a temperatura ambiente 3 horas antes de servir.

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